¿Qué es el flujo logístico? El flujo logístico es una parte importante en lo referido al correcto funcionamiento de las compañías. Haciendo referencia a los procesos que suceden entre la fabricación de un producto en concreto hasta la comercialización del mismo y por último, al ser entregado al cliente.
El almacenaje y la distribución también son parte del flujo logístico, así que gestionarlo correctamente depende de mover ingentes recursos e información. De tal manera, que conocer este flujo es esencial para tener una cadena de suministro totalmente optimizada.
Conocer el flujo logístico de una empresa
Para conocer un flujo logístico específico, hay que diseñarlo partiendo de un análisis completo y planificado de la demanda. Sin este análisis, no se puede programar un ritmo de producción optimizado ni hacer un inventario. Del mismo modo, no se puede definir las condiciones de transporte hasta el punto de venta, entre otros procesos.
Lograr que sea eficiente y que el rendimiento de la cadena de suministro no disminuya no depende enteramente de los procesos logísticos como tales. Es decir, el flujo logístico no depende solamente del almacenamiento de los productos, del abastecimiento, de los pedidos y de la distribución. Depende también del buen trabajo de todos los departamentos de las compañías.
Cuáles son los tipos de flujos logísticos
Según la forma y la etapa de la producción en la que están operando, pueden definirse claramente al menos 2 tipos de flujos logísticos.
- Los flujos internos; son conocidos como flujos de producción y hacen referencia al movimiento que se genera en torno a la materia prima y a los componentes del proceso de producción. En este caso, al aprovisionamiento. Además, el flujo interno se refiere también a los procesos de transformación, fabricación, manipulación, almacenamiento y transporte de elementos y materiales.
- Flujos externos; los cuales se dividen a su vez en 2 grupos: el flujo de suministro y el flujo de distribución. El primero hace referencia a la circulación de materias primas desde el proveedor hasta el sitio de almacenamiento. Por otra parte, el flujo de distribución es el referido al movimiento de los productos terminados de la empresa y que van desde el almacén hasta el cliente final.
Estrategias para gestionar el flujo logístico
Esto tiene que ver con las necesidades de suministro. Por ello, deben aplicarse diversas estrategias para que los procesos sean eficientes.
- Flujo push; es una estrategia para elaborar productos que se requieren estrictamente en función de la demanda.
- Flujo pull; en donde la orden de fabricación de los productos se pone en marcha sí. Solo sí hay una demanda real y efectiva de dichos productos. Esto se evidencia en aquellos productos solicitados por encargo o aquellos que son altamente personalizados.
- Tenso; se conoce también como flujo just-in-time, el cual está basado en poder suministrar tanto las materias primas como los productos terminados al momento de ser demandados. De esta forma, se reducen enormemente las existencias guardadas en los almacenes y se evita el exceso de stock.
- Sincrónico; es aquel que se basa en suministrar distintos materiales, piezas y elementos a medida que el proceso de producción se pone en marcha.
El flujo logístico 4.0
Los avances en la automatización de los procesos de logística se han convertido en una solución palpable para múltiples compañías para que sigan siendo competitivas. Dentro de mercados cada vez más saturados y en donde la llamada industria 4.0 es la que tiene la voz cantante en los mercados actuales.
Bajo esta nueva tecnología, la gestión del flujo logístico tiene mejorías notables cuando muchos procesos u operativas son automatizados. Cuando la cadena logística está automatizada, el intercambio de la información se hace eficiente en su justa medida.
Con la implementación de diversos almacenes automatizados y de maquinaria robotizada, las compañías reducirán costes, aumentarán la productividad y disminuirán riesgos asociados. Estos 3 factores son los que determinan si los flujos logísticos implementados funcionan de forma eficiente o si es todo lo contrario.
Beneficios de una gestión eficiente de los flujos logísticos
Gestionar estos elementos de las compañías es básico e importante, ya que se trata de aumentar el rendimiento máximo de las cadenas de suministro y así se verán beneficios a corto, mediano y largo plazo. Así como también, podrán verse este tipo de beneficios.
- La productividad aumenta considerablemente. Es probablemente uno de los beneficios más palpables, ya que es lo que se espera cuando se gestionan flujos logísticos eficientemente. La productividad se ve beneficiada desde las propias líneas de producción hasta la entrega de los productos.
- Hay mejoras en la gestión de inventarios. Cuando los departamentos de las empresas comparten toda la información posible, se obtiene un mayor control sobre las mercancías y productos terminados. De esta forma, es muy difícil que una empresa enfrente problemas de flujo logístico tales como exceso de stock y la rotura del mismo.
- Reducción de costes. Cuando se conocen y se optimizan los flujos logísticos, se hace también con todas las operativas y procesos de producción de productos y servicios. De esta manera, a mayor rendimiento, reducción de costes operativos y logísticos.
Mejoras en la competitividad
Cuando se gestiona eficientemente los flujos logísticos, las empresas pueden mejorar la productividad, llegar a más clientes y expandirse. Lo que se traduce en mejoras de competitividad empresarial. Así, pueden explorar mercados más amplios en búsqueda de aumentar sus ingresos.
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